Divino Niño Jesús

Permite que yo te adore, día, tarde y noche; tú bien sabes mis pesares, pues a ti te los confío, dale paz a mi alma y alivio al corazón mío; de tu mano no me sueltes, agradarte siempre ansío, permíteme que te adore amado niño Jesús, porque en ti yo confío.

Que este sea un tiempo de crecimiento espiritual y de renovación en nuestra relación contigo Jesús. Que María nuestra madre nos ayude a acercarnos más a ti a través de la oración.

Confiamos en que tú harás cosas maravillosas en nuestras vidas durante este tiempo, gracias por escuchar nuestras súplicas. Amén